El incidente dejó un muerto y decenas de personas heridas que tuvieron que ser ingresadas en un centro de salud; el comunicado de la aerolínea.
Los investigadores trabajan para determinar con exactitud qué ocurrió con el avión de la compañía Singapore Airlines que tuvo que aterrizar de emergencia este martes luego de sufrir “fuertes turbulencias” tras salir del aeropuerto de Londres con destino a Singapur.
Al desviarse y aterrizar en el aeropuerto de Bangkok, la tripulación reportó a las autoridades y equipos de emergencia que un pasajero había fallecido y varios habían resultado heridos. El hospital Samitivej, a donde fueron trasladados, confirmó que 20 de ellos -los cuales son de nacionalidad británica, malasia, australiana, singapurense, neozelandesa, filipina y hongkonés- se encuentran internados en la sala de cuidados intensivos producto de las contusiones. Además, otros 38 están en planta próximos a ser dados de alta, sumándose a los 27 que ya pudieron volver a sus hogares y a las 19 personas que sólo requirieron atención en el aeropuerto.
El pasajero que falleció, en tanto, fue identificado como Geoffrey Kitchen, un hombre de nacionalidad británica de 73 años que sufrió un ataque cardíaco durante el vuelo SQ321 que había partido del aeropuerto londinense de Heathrow ese lunes por la noche.

A través de un comunicado, Peter Seah, presidente de Singapore Airlines, dijo: “En nombre de la junta directiva de Singapore Airlines, extiendo mi más sentido pésame a la familia y seres queridos de nuestro pasajero que falleció el 21 de mayo de 2024 en el incidente del SQ321. Aseguro a todos los pasajeros y miembros de la tripulación que estaban a bordo del avión que estamos comprometidos a apoyarlos durante este momento difícil. También deseo expresar mi gratitud a todos los que en Singapur, Tailandia y todo el mundo están ayudando a los afectados por este incidente”.
Según informaron medios locales, la mayoría de los pasajeros sufrieron heridas porque no llevaban puesto el cinturón de seguridad en el momento en que comenzaron las repentinas turbulencias.
El Boeing 777 -que llevaba 211 pasajeros y 18 tripulantes- había alcanzado una altitud de 37.000 pies, pero, producto de las incidencias climáticas, tuvo que descender de forma repentina y brusca a 31.000 pies en un espacio de tres minutos. Luego de aproximadamente 10 minutos, se vio obligado a bajar nuevamente con rapidez. Estos movimientos provocaron la caída de las máscaras de oxígeno y la activación del protocolo de emergencia, lo que sembró el pánico entre los pasajeros.

“Singapore Airlines traslada sus profundas condolencias a la familia de la persona fallecida. Nuestra prioridad es proporcionar toda la asistencia posible a los pasajeros y los tripulantes a bordo”, afirmó la compañía en un primer comunicado.
Horas después, el director ejecutivo de la compañía Singapore Airlines, Goh Choon Phong, publicó un video en el que “lamentaba profundamente” el hecho ocurrido y pedía disculpas por la “traumática experiencia” del vuelo.
Finalmente, la aerolínea -que el año pasado fue elegida como la mejor del mundo por sus servicios a bordo y su primera clase- confirmó en un segundo comunicado que 131 pasajeros y 12 tripulantes que iban a bordo del avión accidentado llegaron a su destino original, que era Singapur, este miércoles a la madrugada en un vuelo particular contratado por la empresa para ellos. Mientras tanto, otros 79 pasajeros y seis tripulantes permanecen en la capital de Tailandia, incluyendo aquellos que están recibiendo asistencia médica y quienes viajaban con ellos.
Con una fuerte presencia en el sudeste asiático, Asia oriental y Asia meridional, también opera vuelos a través del Océano Pacífico gracias a una flota de más de 180 aviones, con una red combinada de pasajeros que abarca más de 110 destinos.
Fuente: La Nación