Lo advierten los farmacéuticos en Mendoza. Ocurre luego de que la obra social disminuyera el porcentaje de descuento y se pasaran medicamentos a venta libre.
Los farmacéuticos de Mendoza advierten que hay un descenso en el volumen de recetas de Pami que se dispensan. Mario Valestra, presidente del Colegio Farmacéutico de Mendoza dijo que en la entidad observan un descenso de 30%. A partir de allí, las posibles razones.
Sin dudas, los cambios efectuados por la obra social en cuanto a la cobertura han tenido impacto en esta situación y así lo reconoció el profesional. En setiembre del año pasado, Pami dispuso dar de baja el plan Vivir Mejor y con ello se perdieron muchos descuentos totales, con lo cual medicamentos que tenían 100% de cobertura y se entregaba gratuitamente, dejaron de tener esa condición para tener que pagar una parte. Otros redujeron el porcentaje que paga la obra social mientras que varios otros fueron pasados a venta libre por lo que directamente dejaron de tener algún tipo de descuento. Los afectados no fueron pocos: en Mendoza la entidad tiene 247.000 afiliados.
Valestra explicó que los últimos meses los medicamentos en general no han aumentado significativamente o, si lo han hecho, ha sido por debajo del índice de precios al consumidor (IPC). Pero no ha sido así para los afiliados de Pami. Explicó que para ellos la lista de precios tiene valores por debajo de la venta al público general pero que esos valores preferenciales han aumentado lo que encareció el costo para los jubilados. A ello se sumó una reducción de los descuentos que les hace la prestadora.
“En el tema jubilados, como tiene un precio especial el medicamento, ha ido disminuyendo esa brecha del precio especial. Por eso, al ir disminuyendo, el jubilado siente que le ha aumentado el medicamento y efectivamente, a ellos sí le han aumentado por este efecto indirecto”, describió.
Luego añadió: “Las normas que llevaron a cabo a nivel nacional, que sacaron el programa Vivir Mejor y lo reemplazaron por el subsidio social, ha hecho que una gran masa de jubilados no tenga cobertura al 100%, por lo menos en los planes que antes sí los tenían, y eso afecta en forma directa”.
Para que se entienda mejor dio un ejemplo. Dijo que si un medicamento hace un año valía $100, para el jubilado de Pami valía 60, y sobre eso aplicaban los descuentos. “Hoy ese medicamento si vale $100, para el jubilado vale 80 y ahí aplican los descuentos. Es decir, esa brecha que había de precio entre el precio Pami y el precio público ha disminuido, entonces por eso el jubilado siente que le ha aumentado más que lo que ya le aumentó. Eso es lo que está pasando y lo que hemos visto y por eso se ha disminuido tanto el consumo de Pami”, explicó.
Hay que agregar que muchos medicamentos que quedaron sin cobertura porque fueron pasados a venta libre ya no ingresan como venta Pami sino que se compra particular. El tema es que es probable que muchos dejen de comprarse.
El farmacéutico explicó que por esta nueva normativa, que pasó productos a venta libre, las obras sociales en general dejaron de cubrirlos. Entonces quizás “no lo pueden llevar, antes tenían cobertura al 100%, los analgésicos, la mayoría tenían cobertura al 100%, ahora no tienen cobertura al 100%”. Consideró que todo esto va afectado no solo el consumo sino también la calidad de vida.
Bajos ingresos de los jubilados
La obra social Pami presta cobertura a una mayoría de afiliados jubilados (a los que se suman algunos otros adherentes). En todo el análisis no puede dejar de considerarse la apremiante situación económica que atraviesa una buena parte de este colectivo. Los montos de sus haberes han ido perdiendo poder adquisitivo y en abril, la jubilación mínima, sumando el bono extraordinario de $70.000,es de $355.820,63. En tanto, quienes cobran la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) cobran $298.656,50 (con bono). Lo que dicen los adultos mayores, en particular quienes todos los miércoles marchan en reclamo por la pauperización de sus condiciones de vida, es que obviamente, quienes ganan un poco por encima de la mínima tampoco van holgados. Esto ha dejado a una buena proporción sumida en la pobreza y la dependencia.
Tras los mostradores de las farmacias, varios profesionales relatan que es muy frecuente que los afiliados dejen de llevar lo que necesitan o deban elegir porque no pueden costear todo. También sucede que no ingresan dentro de los parámetros para acceder al subsidio que restituya la cobertura pese a asegurar que no les alcanza para vivir y que deben apelar a la ayuda de familiares. Testimonios de jubilados expresan su angustia por no poder comprar todos los medicamentos que necesitan para paliar sus enfermedades o cuidar su salud.
Los cambios en la cobertura de medicamentos Pami
Cuando se implementaron los cambios, en la oficina local de la obra social aseguraron que no hubo un recorte. Consideraron que se trataba de poner orden y subrayaron que “ningún afiliado se iba a quedar sin medicación” y que podrían realizarse gestiones para recuperar los descuentos. Luego de haber implementado un sistema que resultaba demasiado engorroso para los adultos mayores, decidieron simplificarlo.
A partir de septiembre de 2024, la obra social dispuso que 44 principios activos o moléculas dejaran de tener cobertura total y debiera abonarse una proporción. Ya antes se había tomado una disposición similar. Se sumaron los que empezaron a considerarse de venta libre, sobre lo cual en Pami Mendoza argumentaban que ninguna obra social tiene esa cobertura.
Este número de moléculas implicaría, según señalaron, más de 100 productos según su marca comercial.
El listado incluye aspirina (muy usada para prevenir problemas cardiovasculares), corticoides, medicamentos para el dolor severo como tramadol o morfina, antibióticos, antipsicóticos y antidepresivos, en un segmento en el que son frecuentes los problemas de salud mental y el deterioro cognitivo.
losandes